Las autoridades chinas están evaluando la opción de que Elon Musk, el hombre más rico del mundo, adquiera las operaciones de TikTok en Estados Unidos si el Tribunal Supremo estadounidense finalmente ordena el cierre de la popular red social, según reporta Bloomberg. Esta opción surge mientras Pekín considera alternativas a la prolongada batalla legal, lo que sugiere que el futuro de la plataforma ya no está exclusivamente en manos de la empresa matriz china, ByteDance.
TikTok en la cuerda floja
El gobierno chino preferiría que TikTok siga siendo propiedad de ByteDance, pero las conversaciones sobre la posible venta del negocio estadounidense muestran que se están explorando diferentes caminos. Si no se llega a un acuerdo para separarse de ByteDance, TikTok podría dejar de operar en EE. UU. el 19 de enero, un día antes de que Donald Trump regrese a la presidencia. Durante su mandato, Trump intentó prohibir TikTok, y ahora busca que el Tribunal Supremo paralice la ley que podría llevar al cierre de la plataforma hasta que él asuma nuevamente el cargo.
Elon Musk: ¿un comprador potencial?
Elon Musk, quien adquirió Twitter (ahora X) en 2022, ha mostrado en el pasado su apoyo a TikTok. En abril de 2022, Musk expresó que, en su opinión, TikTok no debería ser prohibido en Estados Unidos, argumentando que hacerlo iría en contra de la libertad de expresión. Esta postura coincide con la defensa de TikTok ante el Supremo, que sostiene que su prohibición violaría la Primera Enmienda de la Constitución de EE. UU.
Además de ser dueño de Tesla, con una importante base de producción en China, Musk ha mantenido estrechos lazos con Donald Trump, lo que podría facilitar un posible acuerdo entre China y EE. UU. sobre la venta de TikTok. Sin embargo, el proceso de separación de TikTok de ByteDance sería un desafío enorme, y, dado que Pekín tiene una acción de oro en ByteDance que le otorga derecho a veto, cualquier venta tendría que contar con la aprobación explícita del gobierno chino.
Valoración y obstáculos
Las operaciones de TikTok en EE. UU. están valoradas entre 40.000 y 50.000 millones de dólares, lo que podría representar un desafío incluso para Musk, quien tuvo dificultades para adquirir Twitter por 44.000 millones de dólares. Además, las restricciones del gobierno chino sobre la venta de algoritmos de software hacen que el proceso de venta de TikTok sea aún más complicado.
Por ahora, la opción de que Musk adquiera las operaciones de TikTok en EE. UU. es solo una de las opciones contempladas, y no está claro si Musk o TikTok están al tanto o han participado en estas deliberaciones.
