Fuente: AFP
La primera votación del cónclave del 7 de mayo terminó con fumata negra. Los 133 cardenales reunidos en la Capilla Sixtina no lograron alcanzar el consenso necesario —al menos 89 votos— para elegir al nuevo papa tras el fallecimiento de Francisco, el pontífice argentino que marcó a la Iglesia por su visión reformista y cercana a los pobres.
Un ritual centenario, seguido por miles
Más de 50 mil personas abarrotaron la plaza de San Pedro en el Vaticano, expectantes ante la icónica chimenea de cobre. El humo negro, símbolo de desacuerdo, fue acompañado por murmullos y lamentos entre la multitud. La votación se dio tres horas y cuarto después de la solemne orden de «extra omnes», que marca el inicio del aislamiento de los cardenales.
“No importa que sea humo negro, el Espíritu Santo está trabajando”, expresó James Kleineck, turista texano de 37 años.
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¿Qué ocurre dentro del cónclave?
Los cardenales electores, todos menores de 80 años, permanecen comunicacionalmente aislados: sin internet, teléfonos ni contacto con el exterior. Votan bajo los frescos de Miguel Ángel y en presencia de la imagen del Juicio Final.
Cada uno deposita su voto en una urna, y las papeletas se queman con químicos especiales para indicar el color del resultado: negro para sin acuerdo, blanco cuando hay nuevo papa.
El juramento es claro: guardar secreto y actuar por disposición divina, en un ambiente solemne que prohíbe debates formales. Las negociaciones ocurren en espacios como la residencia Santa Marta, durante comidas o reuniones privadas.
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El futuro de la Iglesia, en juego
Francisco deja un legado progresista y global. Fue el primer papa latinoamericano y nombró al 80% de los cardenales que hoy votan, provenientes de más de 70 países, lo que hace de este cónclave el más internacional de la historia.
Entre los nombres que suenan con fuerza están:
- Pietro Parolin (Italia): exsecretario de Estado de Francisco.
- Pierbattista Pizzaballa (Italia): patriarca latino de Jerusalén.
- Peter Erdo (Hungría): conservador con postura moderada.
- Malcolm Ranjith (Sri Lanka): firme defensor del tradicionalismo.
- Ángel Fernández Artime (España): superior de los salesianos.
¿Cuánto puede durar el cónclave?
Las elecciones pasadas tomaron dos días, pero algunos cardenales estiman que este proceso podría extenderse hasta cinco, dada la división entre “bergoglistas” (seguidores de Francisco) y conservadores.
“La Iglesia no se hará ningún favor si elige a alguien conservador”, opinó Catriona Hawe, visitante irlandesa.
