
La inflación en México mostró una desaceleración en la primera quincena de marzo de 2025, ubicándose en 3.67% anual, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Este descenso refleja una moderación en el aumento de precios en comparación con meses anteriores, brindando un respiro a la economía nacional.
A pesar de la desaceleración general, ciertos productos esenciales registraron incrementos significativos. Por ejemplo, la carne de res aumentó un 1.53%, el tomate verde subió un 10.45% y el limón presentó un alza del 9.02%. Estos incrementos pueden impactar directamente en el gasto de los hogares mexicanos.
Por otro lado, algunos productos mostraron reducciones en sus precios, contribuyendo a la moderación de la inflación. La cebolla disminuyó un 6.04%, la gasolina de bajo octanaje bajó un 1.32% y el huevo presentó una reducción del 0.84%. Estas disminuciones ofrecen un alivio parcial en el presupuesto familiar.
El índice de precios subyacente, que excluye productos con alta volatilidad, registró un incremento de 0.24% en términos quincenales, con una tasa anual de 3.56%. Mientras tanto, el índice no subyacente disminuyó un 0.19% en la quincena, aunque su tasa anual se ubicó en 3.89%. Estos indicadores sugieren una tendencia hacia la estabilidad en los precios de bienes y servicios.
Analistas económicos consideran que esta moderación en la inflación podría influir en las decisiones del Banco de México (Banxico) respecto a la política monetaria. Se espera que el banco central continúe con su ciclo de flexibilización, lo que podría traducirse en una reducción de las tasas de interés en el corto plazo, buscando incentivar el crecimiento económico y mantener la estabilidad financiera en el país.