Entre enero y principios de diciembre se notificaron al menos 249.900 casos sospechosos de cólera en Yemen, lo que supone un 35 % del total de contagios de esta enfermedad, advirtió este lunes la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Además, el país registró al menos 861 muertes asociadas a esta enfermedad, un 18 % de la mortalidad mundial.

Sólo en noviembre el número de casos y muertes notificados en Yemen fueron un 37 % y un 27 % superiores a los registrados en el mismo mes de 2023, aseguró la agencia sanitaria de la ONU en un comunicado de prensa.

Según el organismo, este aumento se debe a un registro más detallado con datos de todas las gobernaciones del país, así como a la transmisión permanente de la enfermedad en Yemen en los últimos años, especialmente durante el mayor brote registrado de su historia reciente entre 2017 y 2020.

«El brote de enfermedades transmitidas por el agua, como el cólera y la diarrea acuosa aguda, supone una carga adicional para un sistema de salud que ya está sobrecargado y se enfrenta a múltiples brotes de enfermedades», afirmó en el comunicado el representante de la OMS en Yemen, Arturo Pesigan.

Esto, sumado a «la falta de acceso a agua potable, las malas prácticas de higiene comunitaria y el acceso limitado a un tratamiento oportuno» que sufre el país dificultan «aún más» la prevención y el control del cólera, indicó.

Por otro lado, según las proyecciones de la OMS para el periodo de octubre de 2024 a marzo de 2025, la respuesta al cólera en Yemen enfrenta un déficit de financiación de 20 millones de dólares (19,2 millones de euros).

Entre marzo y noviembre de 2024 se cerraron un total de 47 centros de tratamiento de la diarrea y 234 centros de rehidratación oral por falta de financiación, a los que se prevé que se sumen otros 56 en estas últimas semanas de año.